Un Max Verstappen resignado o frustrado porque nada funciona y nada ayuda; todo tipo de sentimientos serían comprensibles después de la decepcionante clasificación en Hungría. Pero fue principalmente el primero, la resignación. «En la carrera probablemente no irá mucho mejor».
Que el cuatro veces campeón del mundo no pudiera aspirar a la pole el sábado en Hungría debido a los problemas de equilibrio y agarre ya se esperaba; nada funciona. Pero se esperaba más que el P8, incluso detrás del Sauber de Gabriel Bortoleto. Sin embargo, Verstappen relata con calma lo sucedido en el paddock después de la carrera: «Bueno, no ha ido bien todo el fin de semana, siempre es lo mismo. Simplemente no tengo agarre, no puedo atacar las curvas y no puedo acelerar».
No falta trabajo duro, ni intentos de encontrar soluciones, según Verstappen: «Realmente hemos intentado muchas cosas, pero nada funciona». Eso no augura nada bueno para la carrera del domingo. «¿Será también malo? Bueno, realmente no tengo la confianza de que de repente vaya mucho mejor».
