¡El GP de Azerbaiyán está a la vuelta de la esquina! Después de un fin de semana de carreras bañado por el sol en Monza, y una excursión de Max Verstappen al Nürburgring, el circo de la Fórmula 1 viaja esta semana a Bakú. La ciudad costera abre sus puertas para la decimoséptima ronda de la temporada actual. El rapidísimo Circuito de la Ciudad de Bakú suele ofrecer un gran espectáculo, y este año el clima también podría jugar un papel importante. ¡Aquí puedes consultar el pronóstico del tiempo para el GP de Azerbaiyán!
La parte europea de la temporada de Fórmula 1 ha sido a menudo azotada por la lluvia. Aunque en Italia se mantuvo seco, los pilotos tuvieron que lidiar con condiciones cambiantes en carreras anteriores. Durante los Grandes Premios de Gran Bretaña, Bélgica y los Países Bajos, llovió en diferentes momentos. También en Azerbaiyán, parece que la humedad podría jugar un papel este fin de semana. Normalmente, en esta época del año el clima es agradable en Bakú, pero según las últimas predicciones, Verstappen y sus colegas no se mantendrán secos.
Pronóstico del tiempo para el GP de Azerbaiyán
El viernes, cuando están programados el primer y segundo entrenamiento libre, parece que va a llover bastante. La Fórmula 1 tendrá que lidiar con temperaturas de hasta 23 grados Celsius, mientras que la probabilidad de precipitaciones es del 100 por ciento. No será hasta la noche cuando el tiempo parece mejorar. El sábado, durante la crucial clasificación, probablemente se mantendrá seco. La probabilidad de lluvia es sólo del 30 por ciento, aunque la temperatura bajará a unos 21 grados. El domingo, la temperatura subirá un poco, pero también aumentará la probabilidad de lluvia.
Además, el fin de semana de carreras en Bakú también se verá fuertemente influenciado por el viento, especialmente el sábado. Desde el noroeste, pueden surgir ráfagas de viento traicioneras de vez en cuando. Debido a los altos edificios alrededor del circuito, esto puede causar situaciones impredecibles; una ráfaga de viento repentina tiene un impacto directo en la maniobrabilidad de un coche de Fórmula 1. Durante el GP de Azerbaiyán, ya hemos visto esto varias veces.
