Cyril Blais, jefe de Maserati MSG Racing, y su piloto Stoffel Vandoorne, han revelado un poco sobre las comunicaciones de radio entre ingenieros y pilotos, a veces misteriosas con sus mensajes codificados.
¡Y de repente, el silencio! Más que en la Fórmula 1 o en las carreras de resistencia, las radios se calientan considerablemente en la Fórmula E entre el ingeniero de carrera, ubicado en el garaje, y el piloto. Pero cuando se trata de lanzarse en una vuelta rápida en la clasificación, el silencio se instala y solo un pequeño chisporroteo acompañará durante un minuto a un minuto y medio a todos aquellos equipados con auriculares en los garajes, incluido el de Maserati MSG Racing que nos abrió sus puertas en Mónaco. «Ese será el único momento del fin de semana así», sonríe Cyril Blais, el jefe del equipo, «y será el piloto quien tenga que hacer su trabajo».
El resto del tiempo, los intercambios son casi constantes, como será el caso nuevamente en Tokio este fin de semana (E-Prix a las 8 horas, sábado y domingo). «En los entrenamientos y la clasificación, es bastante similar a otras disciplinas», continúa Blais, cuyo equipo tiene su base entre Mónaco (oficinas y simulador) y Saint-Laurent-du-Var (taller). «Pero en la carrera, tratamos de mantener cierta información crítica para nosotros, por lo que muchos mensajes están codificados. Es algo propio de la FE porque no tenemos telemetría en vivo sobre el rendimiento o el nivel de energía de la batería. Así que tratamos de encontrar formas ingeniosas de comunicarnos manteniendo cierta confidencialidad».
«
Pero cuidado, los intercambios no tienen nada que ver con los «mensajes personales» de Radio Londres y los versos de Paul Verlaine. «De hecho, tenemos códigos que aparecen en el dash (la pantalla en el volante), no necesitamos pensar demasiado, sonríe Stoffel Vandoorne, el campeón del mundo 2022, que deletrea estas letras y/o números a su ingeniero tan regularmente como sea posible, cada vuelta si es posible. No siempre es fácil en la batalla, pero es importante que el equipo sepa lo que está pasando en el coche, especialmente porque hay mucha estrategia en nuestras carreras.»
Entrenamiento en simulador, oídos indiscretos y mensajes codificados
Entre los «bips-bips», que señalan a un piloto antes de cada curva cuándo soltar el acelerador y luego iniciar la regeneración de energía para ahorrar al máximo mientras se mantiene rápido, la información a transmitir y la que se debe escuchar, todo en circuitos con muy pocas rectas, se requiere una gran concentración.
«Al principio, cuando aún no estás acostumbrado a la FE, todo esto te salta a la cara, se ríe el piloto belga de Maserati, quinto tiempo en la primera sesión de entrenamientos libres en Japón. Hay mucha información que aprender también porque hay muchos ajustes que cambiar (en las ruedas y botones del volante). Pero te acostumbras con el simulador, pasamos mucho tiempo en él por eso.»
Cyril Blais, el jefe de Maserati MSG Racing
«Es muy difícil obtener información de otros equipos porque los códigos, que son bastante avanzados, cambian regularmente»
Y como en cualquier competición, los pequeños camaradas intentan prestar un oído indiscreto y descifrar también los mensajes para obtener información adicional sobre la competencia. «Pero es muy difícil obtener información de otros equipos porque los códigos, que son bastante avanzados, cambian regularmente, señala Blais. Podemos cambiar la forma de codificar, pero también la información transmitida dependiendo de lo que vaya a ser «crítico» en cada carrera, para algunas las temperaturas de los sistemas, para otras el nivel de energía, etc.»
Con la obligación para el piloto de nunca olvidarse o equivocarse: «Si no nos dan la información, insiste el jefe del equipo, no tenemos una base sobre la cual hacer nuestra estrategia y se vuelve complicado. Así que la FE, es realmente un trabajo de equipo complejo.»
«
