Sergio Pérez, piloto de Red Bull Racing, ha vuelto a decepcionar a su equipo. En la sesión de clasificación para el Gran Premio de Singapur, fue eliminado ya en la Q2, lo que significa que comenzará la carrera del domingo desde la posición 13. Pérez describió la situación como una «pesadilla».
Con la presión sobre Red Bull, especialmente en el campeonato de constructores, el equipo estaba ansioso por tener un buen desempeño en la clasificación. En el campeonato de constructores, McLaren ha superado a Red Bull y Ferrari está pisándole los talones al equipo de Max Verstappen y Pérez. Verstappen superó las expectativas en la sesión de clasificación en Singapur (P2), mientras que Pérez decepcionó enormemente.
Un tanto culpable, Pérez explicó su situación después de la carrera. «Una pesadilla», comenzó. Es un término que a menudo usa después de un rendimiento decepcionante. Luego dijo: «En la Q2, algo extraño sucedió con mis neumáticos. No pude conseguir la temperatura correcta. Desafortunadamente, esto hace una gran diferencia. Para mí, significó la eliminación en la Q2».
Para la carrera del domingo (inicio: 12:00 UTC), Pérez no tiene ilusiones. «Es difícil adelantar en este circuito. Será una carrera difícil. Para mí, será cuestión de intentar sumar puntos y minimizar el daño tanto como sea posible», concluyó Sergio Pérez.
