Oscar Piastri – quien tuvo un fin de semana desastroso en la última carrera en Bakú – admite que no puede permitirse más actuaciones de este tipo. El australiano ha liderado el campeonato de pilotos durante bastante tiempo, pero ahora siente la presión de su compañero de equipo Lando Norris y del rival Max Verstappen. En la previa del GP de Singapur, una carrera decisiva para la lucha por el título, Piastri explica lo que ha aprendido.
Después de un accidente en la clasificación, Piastri comenzó desde el noveno lugar en Bakú. Tras un mal comienzo, se equivocó en las estrechas curvas del circuito callejero y se retiró ya en la primera vuelta. Como resultado, su ventaja sobre Norris se redujo a 25 puntos. Max Verstappen, quien ganó su segunda carrera consecutiva en Azerbaiyán, redujo su déficit a 69 puntos. Esto parece indicar que el piloto de Red Bull se está convirtiendo lentamente en un candidato al título.
«No queremos fines de semana como el de Bakú y sabemos que no podemos permitirnos tenerlos», dijo Piastri antes del GP de Singapur. «Por supuesto, he aprendido algunas lecciones duras por mi parte, pero creo que también hemos visto como equipo cómo podemos mejorar nuestros fines de semana. Así que eso siempre es importante. Bakú demostró cuán rápido pueden cambiar las cosas, pero al mismo tiempo nos recordó lo que nos ha hecho tan exitosos esta temporada. Mientras nos centremos en eso, nuestras posibilidades de ganar el título solo aumentarán.»
Riesgos
En cuanto a su propio rendimiento, Oscar Piastri admitió que ha aprendido valiosas lecciones sobre la toma de riesgos. «Aprendo principalmente de los riesgos que he tomado», declaró. «No hay nada revolucionario que deba o vaya a cambiar», añadió. «En 16 de las 17 carreras, mis decisiones resultaron ser correctas. Simplemente tengo que seguir concentrándome en las cosas que van bien. Por lo demás, atribuyo Bakú a unos pocos errores».
Piastri enfatizó que puede superar esos errores bastante rápido. «Fue relativamente fácil seguir adelante», opinó el australiano. «En cierto sentido, es más fácil encontrar áreas de mejora cuando cometes tantos errores. Eso hace que la reflexión sea bastante sencilla, lo que me permite volver al trabajo con comodidad. No tuve que detenerme demasiado tiempo en ello. Por supuesto, aprendí mi lección, pero este fin de semana lo abordo como cualquier otro», concluyó con determinación.
