Oscar Piastri no siente aún la presión de conseguir una victoria lo más pronto posible. Su compañero de equipo, Lando Norris, cruzó la línea de meta en primer lugar en Miami a principios de este año. Sin embargo, el australiano no siente la necesidad de replicar el éxito de su compañero de equipo de inmediato. Para Piastri, una victoria ahora podría sentirse menos eufórica.
McLaren ya logró una victoria este año con Lando Norris en Miami, y Oscar Piastri espera que pronto sea su turno. El australiano ya ha terminado en segundo lugar en Mónaco y Austria, pero le gustaría estar en el escalón más alto del podio pronto. «Ha sido un asunto muy reñido en varias ocasiones», comenta Piastri, en una entrevista con SpeedCafe.
Piastri y su visión sobre ganar un Gran Premio
Piastri cree que ganar un Gran Premio sería ‘increíble’, pero aún no siente la presión de lograrlo pronto. «No hay realmente, creo yo, la presión o la urgencia de ganar una carrera», explica el hombre de Melbourne. «Mucha gente dice ‘resuelve este problema lo más pronto posible’ o algo por el estilo. Para mí, eso es lo que se sentiría ganar ahora».
Por lo tanto, al australiano no le molesta que aún no haya podido conseguir una victoria. Piastri piensa que el momento solo se habría sentido como un alivio, y no eufórico. «Especialmente en Austria, pero también en Silverstone, estaba decepcionado de que me perdí (la victoria). Sin embargo, no fue desde el punto de vista de ‘maldita sea, me hubiera gustado deshacerme de eso’. Fue más como si tuviéramos la oportunidad de ganar una carrera de F1 y no lo logramos».
Un sueño de la infancia
Parece que una victoria en la carrera para el joven australiano es solo cuestión de tiempo. Piastri ya está soñando un poco con el momento. «Por supuesto, será muy especial», dice el piloto de McLaren. «La temporada es tan compacta y rápida que, honestamente, creo que la sensación (eufórica) probablemente desaparecerá bastante rápido, tan pronto como vayas al próximo fin de semana. Pero sería muy especial y es algo con lo que soñaba desde que era niño».
