Max Verstappen tiene que demostrar su valía una vez más en Canadá. En Mónaco, el actual campeón del mundo tuvo un revés: problemas con la configuración de su RB20 hicieron que Verstappen no pudiera pasar del sexto lugar. En Montreal, Red Bull enfrenta el desafío de mantenerse un paso por delante de la competencia. El holandés es optimista sobre el desarrollo continuo de su vehículo.
En la previa al fin de semana de carreras en Montreal, Max Verstappen habló sobre el RB20 y cómo Red Bull lo está desarrollando. Durante la clasificación en Mónaco, quedó claro que el vehículo tiene problemas con las irregularidades del circuito: los numerosos kerbstones impidieron que el tricampeón del mundo pudiera registrar un tiempo rápido.
Verstappen habla sobre los desafíos de su RB20
«Creo que tenemos mucho trabajo por hacer y lo sabemos», dijo Verstappen sobre su RB20. «Ha sido un problema desde el primer día de estas regulaciones y aún no hemos podido resolverlo. Mónaco fue una llamada de atención. Hemos tenido muchas buenas discusiones en la fábrica y siento que ahora hay más enfoque en resolver el problema».
Simulaciones fallidas
En el GP de Canadá (del cual dijo anteriormente que sería una carrera desafiante), Verstappen no espera una mejora significativa en comparación con Mónaco. «Todos se están acercando y ya no puedes confiar en tu ventaja, incluso cuando se trata de problemas con los ‘kerbstones'», continuó. «No podemos resolver estos problemas en una semana, pero definitivamente intentaremos optimizar las cosas».
El asesor de Red Bull, Helmut Marko, pintó una imagen preocupante: el austriaco dijo que las simulaciones no coincidían con el rendimiento en la pista. Verstappen quiere matizar eso. «Es muy difícil acertar siempre con la simulación», admitió. «Pero sigue siendo una herramienta muy útil. Nos ayuda a nosotros, los pilotos, a avanzar y podemos probar muchas cosas. Para algunos circuitos, esa herramienta simplemente funciona mejor que para otros».
