Tanto Lewis Hamilton como Charles Leclerc no lograron terminar el GP de São Paulo. Mientras que el siete veces campeón del mundo se retiró tras un temprano toque, su compañero de equipo fue fatalmente sacado de la carrera por Kimi Antonelli. Esto significó el segundo DNF doble de la temporada para Ferrari. Durante el GP de Holanda en Zandvoort, ambos pilotos tampoco lograron cruzar la línea de meta. Un desconsolado Hamilton se disculpó con el equipo después de la carrera, mientras que Leclerc expresó su frustración.
Lewis Hamilton partió desde la decimotercera posición después de una decepcionante clasificación. Sin embargo, su carrera se vio interrumpida temprano por un toque con Franco Colapinto en la recta. El británico rompió el alerón delantero de su Ferrari y tuvo que entrar varias veces a boxes para un nuevo morro y neumáticos frescos. Finalmente, se vio obligado a abandonar la carrera prematuramente. «Después de ese toque, pensé que la suspensión trasera estaba rota», reaccionó un abatido Hamilton. «Intenté mantenerme al ritmo de los chicos que iban delante de mí, pero no tenía ninguna posibilidad»
‘Pecado mortal’
«Este es definitivamente un fin de semana para olvidar rápidamente», continuó el piloto de Ferrari. «Es una lástima, porque me encanta Brasil. Terminar con las manos vacías, no terminar la carrera por segunda vez este año, es realmente terrible. Siento empatía con el equipo, todos hacen su mejor esfuerzo cada semana. Lamento mi parte en la calificación; al final, me puse en esta posición. Mañana nos levantaremos e intentaremos de nuevo».
Por su parte, el compañero de equipo de Ferrari, Charles Leclerc, mostró poco entendimiento por el incidente con Antonelli. Oscar Piastri recibió una penalización de diez segundos, pero según el monegasco, ambos tenían la culpa. «Por supuesto, tenemos reglas y los comisarios deben cumplirlas», comenzó. «Pero en este caso, creo que Kimi (Antonelli) sabía que Piastri estaba en el interior. Independientemente de si estás corriendo lado a lado, no puedes tomar la curva si alguien está allí. Para mí, en realidad era cincuenta-cincuenta – tanto Piastri como Antonelli eran culpables. De todos modos, mi carrera terminó allí», concluyó frustrado. «Hoy definitivamente tenía la vista puesta en el podio, así que esto es simplemente un pecado mortal».
