Toto Wolff observa cómo el trabajo en simulador se vuelve cada vez más importante en la Fórmula 1 y en el automovilismo en general. El austriaco comparte una anécdota sobre su hijo y joven piloto de karts, Jack Wolff, quien también pasa mucho tiempo en el simulador. «Sale a la pista y es inmediatamente el más rápido», dice el orgulloso padre.
El trabajo en simulador juega un papel cada vez más importante en la Fórmula 1. Los diferentes equipos contratan cada vez más a pilotos de simulador para proporcionar valiosos comentarios. Max Verstappen también pasa mucho tiempo en el simulador y a principios de enero incluso participó en dos importantes carreras de simulador, incluyendo las 24 Horas virtuales de Daytona.
El jefe del equipo Mercedes, Toto Wolff, ve cómo el simulador se vuelve cada vez más importante en el automovilismo, especialmente gracias a su hijo de siete años. «Mi hijo tiene siete años. Tiene un simulador de karts en casa. Corre en línea contra otros», explica Wolff a Auto, Motor und Sport. «Hay cuatro circuitos relevantes en Italia. En uno de ellos nunca había corrido. Pero lo conocía por el simulador.»
Sin distinción
El austriaco observó cómo la preparación de su hijo Jack dio sus frutos de inmediato. «Sale a la pista y es el más rápido de inmediato. Luego me dice: ‘Conozco la pista’. Yo respondo: ‘Sí, pero solo en el simulador’. Él replica: ‘Te lo digo, he estado aquí antes’. Los jóvenes ya no hacen distinción entre la realidad y el mundo virtual», concluye Wolff.
El jefe del equipo Mercedes recomienda el trabajo en simulador a todos los pilotos, pero entiende que puede no funcionar igual de bien para todos. «Los pilotos más veteranos probablemente lo encontrarán un poco más difícil. Y tal vez no funcione para todos como para Max Verstappen (nota del editor).»
