Cadillac se unirá a la Fórmula 1 en 2026. El undécimo equipo se presenta como un equipo de carreras completamente estadounidense, pero tiene grandes instalaciones en Gran Bretaña, la cuna de la tecnología de la F1. Sin embargo, el CEO de McLaren, Zak Brown, no teme a la competencia, al contrario, da la bienvenida a Cadillac y cree que el nuevo equipo fortalecerá financieramente el deporte y agregará valor a la Fórmula 1.
Durante el fin de semana del Gran Premio en Hungría, Brown habló positivamente sobre la llegada de Cadillac, que ya está ocupado preparándose para la temporada de debut en 2026. «En términos de empleados, creo que atraerán más talento del que producirán», bromeó el estadounidense ante los medios presentes. «Pero eso está bien. Si alguien elige trabajar para un equipo rival, como jefe de equipo, debería preguntarme qué puedo hacer mejor».
Impacto positivo
El nuevo equipo ha establecido su base europea en Silverstone, a poca distancia de varias otras fábricas de Fórmula 1. Por lo tanto, se encuentra en el corazón del deporte. A pesar de las preocupaciones anteriores de los equipos sobre una posible disminución en su participación en los ingresos, Brown no está preocupado por la competencia. Al contrario, ve oportunidades. «En términos de patrocinadores, creo que Cadillac atraerá más nuevos socios que los que tomará», dijo Brown. Espera que el equipo, y la empresa matriz General Motors, inviertan seriamente en el deporte. «¿Conseguiremos un mejor acuerdo de televisión estadounidense, más participación estadounidense? Creo que sí», dijo Brown. «Sus patrocinadores y Cadillac invertirán dinero en el deporte, y todos los equipos se beneficiarán de ello».
Según Brown, la llegada de un equipo estadounidense se ajusta a la creciente popularidad de la Fórmula 1 en los Estados Unidos, donde ya se celebran tres carreras. «No me preocupo por los problemas a corto plazo, como la pérdida de algunos empleados o patrocinadores», concluyó optimista. «La contribución que harán al conjunto será mucho mayor». Cadillac completó el proceso de adhesión en marzo, después de inicialmente enfrentar la oposición tanto de la organización de la Fórmula 1 como de los equipos establecidos.
