Alex Albon tuvo que terminar su primer entrenamiento libre en la preparación para el GP de México temprano; debido a un enfrentamiento con el novato de Ferrari, Oliver Bearman, terminó en la pared. El accidente fue tan severo que el Williams no pudo ser reparado a tiempo para el segundo entrenamiento libre. Un contratiempo para Albon, quien se pregunta por qué no se advirtió a Bearman antes.
«Creo que se le informó demasiado tarde (a Bearman) de que yo estaba conduciendo detrás de él», respondió Albon posteriormente a Formula1.com. El piloto de Williams no culpó al novato de Ferrari, que pudo subirse al coche de Charles Leclerc durante el primer entrenamiento libre, por el accidente. «Hizo todo lo posible para acelerar, pero simplemente estaba en el lugar equivocado en la pista».En las cámaras a bordo se puede ver cómo Alexander Albon tiene que esquivar y pierde el control de su coche en el proceso. En este incidente, roza la parte trasera del Ferrari, lo que le hace girar hacia la pared. «Probablemente estaba conduciendo cien kilómetros por hora más rápido», explicó Albon. «No me culpo a mí mismo, pero tampoco creo que todo sea culpa de Bearman. El equipo podría haberle advertido un poco antes. Además, todo esto es nuevo para él; las velocidades son mucho más altas que en la Fórmula 2».
Charles Leclerc
Los comisarios tampoco tomaron ninguna acción adicional. Según un informe, la posición de Bearman no era ‘irrazonable’, pero sí desafortunada. Debido al daño en su FW46, Albon no pudo participar en la segunda sesión de entrenamientos libres. Se consoló con la idea de que sus competidores estaban principalmente ocupados con una prueba de neumáticos para Pirelli. «Es frustrante que sólo haya podido hacer dos vueltas», admitió Albon.
Charles Leclerc, que pudo volver a su Ferrari durante la segunda sesión de entrenamientos libres, tuvo más suerte. A pesar del accidente en la primera sesión de entrenamientos libres, el daño se reparó rápidamente y logró el cuarto mejor tiempo. «Me sentí bien», comentó el monegasco, que la semana pasada en Austin logró su tercera victoria de la temporada. «Las carreras largas parecían prometedoras. Después de la primera sesión de entrenamientos libres, el coche fue reparado rápidamente; no hubo daños importantes», aseguró Leclerc.