La emocionante batalla por el título entre Max Verstappen y Lewis Hamilton en 2021 no solo se libró en la pista. El ex entrenador de rendimiento Bradley Scanes revela cómo Verstappen también intentó superar a su rival en el parque cerrado: durante el fin de semana de carreras en São Paulo, el holandés fue multado con 50.000 euros por inspeccionar el alerón trasero de Mercedes. Eso valió cada centavo, afirma Scanes.
Después de que Lewis Hamilton ganara la pole position en São Paulo, se filmó a Max Verstappen inspeccionando detenidamente el alerón trasero de Mercedes en el parque cerrado. En ese momento, Red Bull sospechaba que sus competidores se beneficiaban de un alerón flexible, que proporcionaba velocidad adicional en la recta. Los controles técnicos posteriores demostraron que la válvula DRS de Hamilton se abría más de lo permitido, lo que resultó en su descalificación para la clasificación y tuvo que comenzar la carrera de velocidad desde el final.
El juego psicológico
En un episodio del podcast High Performance, Scanes explicó cómo la actuación de Verstappen fue acordada dentro de Red Bull. El equipo jugó deliberadamente un juego psicológico para ganar el campeonato. «Brasil fue un buen ejemplo de los juegos mentales que estábamos jugando en ese momento», dijo el británico. «Verstappen se paró detrás del alerón trasero de Mercedes y lo tocó a propósito. Esa era la intención: sabía que recibiría una multa de 50.000 euros, pero no una sanción deportiva».
Según Scanes, la acción de Verstappen tuvo un efecto claro; la atención se desvió hacia Mercedes, que de otro modo habría tenido un fin de semana dominante. «Incluso si no hubiera sucedido nada, habría valido la pena», continuó. «Todos recuerdan la pelea entre Toto Wolff y Christian Horner, que fue ampliamente cubierta por los medios», explicó Scanes. «Pero la batalla entre Verstappen y Hamilton también estaba en pleno apogeo detrás de escena. Incluso Angela Cullen (fisioterapeuta y confidente de Hamilton) se involucró».
