En 2020, la Fórmula 1 regresó al icónico circuito de Zandvoort. Para mi padre, un ferviente fanático de la F1, esto fue un regalo inolvidable para su 80º cumpleaños. Con los boletos más caros y vistas a la línea de salida-meta y a la calle de boxes, estaba encantado. Sin embargo, la carrera lamentablemente no se llevó a cabo debido a la pandemia de coronavirus. Al año siguiente, pude asistir al GP de los Países Bajos con mi padre. Nos fuimos muy temprano para evitar la multitud. Mi padre encontró rápidamente su asiento y su banderín. La carrera fue un espectáculo y las gradas estallaron en aplausos cuando Max Verstappen ganó. Aunque el ambiente era fantástico, volvimos a ver el resumen en casa más tarde. Mi padre admitió honestamente que disfrutaba igualmente viéndolo en la televisión. Me contagié del virus de las carreras y vuelvo cada año. Sin embargo, esa primera vez con mi padre sigue siendo inolvidable.
Jippe Tinga
