Tras el GP de Bahrein, parecen haberse aclarado las relaciones de poder dentro de la Fórmula 1. McLaren es el equipo a batir, mientras que Red Bull aún tiene mucho que mejorar antes de que Max Verstappen vuelva a competir por la victoria. Al menos, eso es lo que los expertos nos quieren hacer creer. Según Lando Norris, el retraso de Red Bull no es tan grande. El líder del campeonato acusó a los austriacos de hacer sandbagging ya durante el GP de China.
Durante la segunda ronda en Shanghai, Lando Norris fue entrevistado por la revista británica Autosport Magazine – a petición suya, respondió que valora el Red Bull RB21 de Max Verstappen mucho mejor de lo que el propio cuatro veces campeón del mundo lo hace. Norris se refirió a la carrera inaugural en Australia, donde cruzó la línea de meta en primer lugar, pero Verstappen le seguía a menos de un segundo.
‘Nunca deben ser subestimados’
«Tuvimos un fin de semana muy bueno en Melbourne, pero Max Verstappen todavía estaba pisándome los talones», dijo el británico de 25 años. «Y eso no es solo porque él es un piloto increíble en esas condiciones», se refirió a las lluvias que azotaron el Circuito de Albert Park. «El coche de Red Bull sigue siendo muy bueno. Necesitas ambos. Y Red Bull simplemente tiene un coche bastante bueno y un piloto muy, muy bueno», resumió Norris. «De lo contrario, nunca podrían competir contra nosotros. Simplemente nunca debemos subestimarlos».
Al mirar su propio McLaren MCL39, Norris no ocultó su opinión: «Admito al 100% que tengo el mejor coche en la parrilla», continuó. «Estoy muy contento de poder decir eso, porque ha pasado un tiempo. Por eso estoy orgulloso del hecho de que lo hemos logrado como equipo. Pero, como siempre se ha dicho: ‘El piloto hace la diferencia’. No podría ganar sin el mejor coche, pero si todo está dentro del uno por ciento, el piloto puede marcar la diferencia. Por eso Max Verstappen podría haber ganado igualmente en Australia. No porque el coche sea una mierda y él sea tan genial, el coche es jodidamente bueno», concluyó el británico de manera enfática.
