Impresionado por su tercer lugar en la parrilla del Gran Premio de Las Vegas, Pierre Gasly sabe que lo esencial se construye en la carrera. La caza de puntos ha comenzado para defender el sexto lugar de Alpine en el Campeonato de Constructores.
Las imágenes se agolpan inevitablemente. Las palabras también. Comienza con palmadas en el hombro, abrazos con un George Russell visiblemente feliz de saludar el rendimiento de Pierre Gasly. También están Max Verstappen y Charles Leclerc, quienes, ambos entre las voces más escuchadas de la parrilla, elogiarán la «fantástica actuación de Pierre». Un tercer lugar en la parrilla ganado de manera justa, en seco, con el sexto mejor equipo de F1 desde Brasil. El noveno si retrocedemos un Gran Premio más.
Desde la distancia, en las alturas de Rouen, Pascale y Jean-Jacques Gasly, los padres de Pierre, se levantaron temprano para disfrutar de un gran impulso a la hora del café con croissant. Pero de ahí a soñar con un top 3 para el hijo… Así que era hora de la emoción familiar. Algo para ir rápidamente a la panadería a comprar una tarta de fresas y otra de frambuesas. Un capricho reservado para los fines de semana que sonríen. Y no importa si no es realmente la temporada.
«Este chico es increíble», se reirá emocionada Pascale, la madre. En el lugar, Pierre Gasly ya no se pertenecía a sí mismo, arrastrado por el torbellino mediático post-clasificación. Un vals de solicitudes que el normando había experimentado hasta ahora cinco veces los domingos, con los podios de Monza (1º en 2020), Interlagos en 2019 (2º en 2019 y 3º en 2024), Bakú (3º en 2021) y Zandvoort (3º en 2023). Teniendo que responder constantemente a un flujo de preguntas clónicas. Así es la vida de un piloto después de un top 3 en F1, donde siempre se celebra y se analiza con gran detalle e insistencia.
Pierre Gasly, 3
«Al cruzar la línea, sabía que había hecho una vuelta casi perfecta»
Buen cliente, y llevado por el placer, Pierre Gasly se puso en modo de pilotaje automático, rebobinando su vuelta de Q3, tejida en un hilo: «Al cruzar la línea, sabía que había hecho una vuelta casi perfecta, pero de ahí a hacer P3 delante de los McLaren, delante de Max, delante de Charles, delante de Lewis (Hamilton), eso, no me lo esperaba. Era inesperado. Después de lo que pasó en Brasil con nuestros dos podios, Esteban (Ocon, 2º) y yo (3º), el ánimo estaba muy alto en el equipo. Y ahora, eso hace aún más bien a la cabeza.»
Un pequeño placer solo, porque estamos al final de la noche del viernes en Las Vegas y la entrega de premios está programada para el día siguiente (alrededor de las 9 de la mañana en Francia el domingo). «Es una verdadera sorpresa», admitía el ex miembro de la academia Red Bull. «Es muy resbaladizo aquí, engañoso, no tenemos agarre. Estaba apuntando a la Q3. Un lugar como el 9º o el 10º parecía un objetivo razonable. Solo teníamos un juego de neumáticos nuevos, así que la adrenalina estaba al máximo. Solo tenía una oportunidad de hacer un tiempo. Estoy feliz por el equipo. Pero esperemos la carrera para celebrarlo.»
La felicidad sin punto, no es realmente felicidad. Sin embargo, al partir tan alto en la parrilla, el piloto de Alpine teóricamente evitará el atasco en la curva 1. Pero tendrá que vigilar detrás de él a Max Verstappen (4º), que nunca hace prisioneros, y a Lando Norris (6º), que puede sembrar confusión con sus salidas a veces erráticas. Una vez fuera de la trampa de la salida, el francés tendrá que jugar la carta de la razón, para ahorrar sus neumáticos en una pista abrasiva, en lugar de entrar en resistencia absoluta frente a alguien más rápido que él. Una evidencia para él. Al menos en frío. Aunque…
«Si hay una oportunidad que aprovechar este fin de semana, intentaremos conseguir un podio, por supuesto», decía. «Salgo del lado correcto de la pista, pero la primera curva es muy complicada aquí. Hay poco agarre. Tendré que estar atento. Y sé que detrás hay pilotos que tienen un ritmo de carrera mucho más rápido con sus monoplazas. Todo se decidirá en la degradación de los neumáticos. Aquí, puede volverse muy complicado muy rápido.»
Partió 4º el año pasado, finalmente se clasificó 11º
El año pasado, en este mismo circuito, el normando partió cuarto y vio cómo su carrera se convertía en una pesadilla (11º al final), víctima del famoso graining (desgaste por el exterior) de sus neumáticos que, de repente, te da la sensación de pilotar un F1 en una pista de hielo: «Este fenómeno inevitablemente perjudicará a algunos coches, como me pasó a mí el año pasado. Me costó caro. Estamos trabajando aquí para que no vuelva a suceder. Será una gran batalla por los puntos. Un verdadero desafío colectivo. También tendremos que manejar el viento que cambia constantemente de dirección. Pero será igual para todos. Solo espero no haber agotado toda mi suerte en la ciudad del juego, porque lo importante es el domingo. Pero ya el otro día, aquí, logré dos birdies en el golf. Incluso en el casino me sonrió.»
¿Entonces? «Entonces, va a estar apretado hasta el final. Quedan tres Grandes Premios y una carrera sprint» (en Qatar) «por disputar. Pero nos hemos puesto en una posición fuerte con nuestro lugar en la parrilla en comparación con Haas y Racing Bulls. Va a ser emocionante. Tenemos que defender nuestro sexto lugar en el Campeonato de Constructores.» Y al lado de Rouen, nos hemos informado, las pastelerías estarán abiertas el domingo.
